En otro tiempo muy populares, ahora casi han caído en desuso. Las lámparas de potencias inferiores a 25w con ampolla estándar A60 o PS60, no son fáciles de localizar hoy día, y mucho menos con ésta disposición de filamento de espiral sencilla en forma de zig-zag. Actualmente, las lámparas de potencias iguales o superiores a 25w trabajan con atmósfera gaseosa, si bien, por debajo de ésta potencia no compensa el relleno gaseoso, debido a que las pérdidas de temperatura del filamento suelen ser importantes. Es por ello que cuando se trata de lámparas muy pequeñas o de baja potencia alimentadas directamente a la tensión de las redes, desde  110 a  250v  para señalización, iluminación nocturna, adorno, iluminación de neveras y hornos u otras aplicaciones similares, se emplea casi exclusivamente el vacío interno, no importando por ello, la longitud relativa del filamento, siempre que ésta se mantenga en los límites impuestos por las dimensiones de la ampolla.

     Hoy día, la estructura de zig-zag, sólo se encuentra en las lámparas más pequeñas antes citadas, ya que en las de ampolla estándar es normal ver el filamento espiralizado en  forma de tres  

Encendida a 225 voltios.

segmentos,   anclado   a  la   varilla  de soporte mediante dos corchetes, tal como se puede apreciar en todas las lámparas para servicio general de la actualidad.

     Ésta lleva, como puede apreciarse, cinco alambres de sujeción, con lo que el filamento queda dividido en seis tramos, formando una guirnalda, lo que le proporciona una mayor resistencia a las sacudidas y vibraciones. No obstante, a pesar de lo comentado, todavía es relativamente fácil ver éste tipo de lámparas en instalaciones al aire libre que han de quedar sometidas a fuertes vibraciones debidas al viento: arcos y guirnaldas de iluminación ferial, navideña y de carnavales. En éstas aplicaciones de exteriores son de desear tanto una mayor robustez del filamento para evitar su ruptura a causa del movimiento, como la ausencia de gas de relleno, que provocaría un sobrecalentamiento excesivo de la ampolla, con el consiguiente peligro de resquebrajamiento y rotura de la misma si es alcanzada por la lluvia.

      Éstas bombillas encontraron gran aplicación en lámparas y aparatos para mesitas de noche, donde no se precisa una potencia elevada y es conveniente evitar las altas temperaturas de la ampolla.

Detalle del filamento y su anclaje. Nótese la característica forma de zig-zag.

     Hasta hace unos años, casi todos los fabricantes ofrecían éste tipo de lámparas estándar de baja potencia en vacío como un producto normal en sus catálogos, si bien en la actualidad, se recurre al tipo de pie y soporte unificado, que sirve para todo tipo de lámparas, tanto en vacío como de atmósfera gaseosa, con potencias comprendidas entre 15 y 100 watios, tan sólo con variar la longitud, grosor y espiralizado del filamento para cada caso.

     El ejemplar aquí ilustrado lo encontré en el año 2002, junto con otras muchas iguales, rebuscando entre los restos de serie que había en Radio Amores", la tienda de mis primos de Puertollano .

Según el dato que figura en algunas de las cajas, está fabricado en Hungría y comercializado en España a finales de los años 70 y principios de los 80, por la empresa de pilas "Cegasa" de San Sebastián, estando marcada con el antiguo y conocidísimo nombre "TXIMIST", hoy ya en desuso. 

     Esto es algo parecido a lo que hoy ocurre con la distribución de lámparas procedentes de China. 

Marca sobre la ampolla.